La rotura de puente térmico (RPT) en perfiles de aluminio es un proceso mediante el cual se mejora la eficiencia térmica de estos perfiles, especialmente en ventanas, puertas y fachadas. Consiste en insertar un material aislante, generalmente de poliamida o resina, entre las secciones interna y externa del perfil de aluminio, separando ambas partes para evitar la transmisión directa de calor o frío. Esto reduce significativamente la pérdida de calor en invierno y la entrada de calor en verano, mejorando el aislamiento térmico de los edificios.
El aluminio, por naturaleza, es un excelente conductor térmico. Sin embargo, en aplicaciones como marcos de ventanas y puertas, esto puede generar pérdidas energéticas. La rotura de puente térmico (también llamada aislamiento térmico) interrumpe la transferencia de calor al introducir un material no conductor entre las dos partes metálicas, creando una barrera que evita el flujo de calor.
1. Extrusión del perfil de aluminio:
2. Mecanizado y preparación de los perfiles:
3. Inserción del material aislante (poliamida o resina):
4. Ensamble de las partes del perfil:
5. Estabilización del perfil:
6. Pruebas y control de calidad:
La rotura de puente térmico es un proceso esencial en la fabricación de perfiles de aluminio destinados a aplicaciones en edificios eficientes desde el punto de vista energético, particularmente en ventanas y fachadas que deben cumplir con estrictas normativas de ahorro energético.